"El mundo es la casa de quienes carecen de ella"

Sherezade

jueves, 13 de octubre de 2011

Coulant de chocolate al ritual del té



Coulant de chocolate al ritual del té


El ritual del té, para las gentes del Sahara, es algo imperturbable ¿o lo es quizá para el hombre blanco?

Se tiene la creencia, que ese ritual, consiste en hacer tres tés, ese ritual es largo, el tiempo en el desierto, es inexistente. El primer té, es amargo como la vida. El segundo, dulce…como el amor y el tercero, suave…como la muerte.
Recuerdo en una ocasión, hace años, muchos, en el Hoggar, al sur de Argelia y en una de las zonas donde el Sahara es más majestuoso, coincidí con unos touaregs, nos invitaron, hicieron esos tres tés. Les explique ese chascarrillo de lo amargo, lo dulce y los suave…les hizo mucha gracia, no entendían nada.
 Bien cierto es, que el ritual en sí existe, se prolonga durante mucho tiempo, se mezcla el té una y otra vez, se calienta, se vuelve a recalentar, se escancia, debe hacer la espuma deseada…todo eso es cierto, pero se trata simplemente de un acto social y un acto de aprovechamiento, lógicamente, mientras, van disminuyendo las propiedades de los ingredientes, azúcar, té y agua, el té va cambiando de sabor y de consistencia. Simple

Ignoro quién es el inventor de la comedieta. En el momento que alguien del desierto, te explique la milonga, es sinónimo, de que por el lugar, ha pasado algún guiri romántico. Posiblemente, el inventor sea, el mismo que se le ocurrió mezclar dátiles con bacon, que respetando los gustos de cada cual, es la más nefasta mezcla, que se pueda hacer con el fruto de la palmera.
No me gustaría ir de desmitificador, a fin de cuentas, es bello ¿no? Igual que la relatividad del tiempo en el desierto, el famoso “tú tienes el reloj y nosotros el tiempo” o el archiconocido “prisa mata amigo”, falso, todo falso.
En honor a la verdad y sin que suene a tópico, si que debo decir, que en algunas zonas del desierto, he conocido la elegancia en su más puro estado, la elegancia es innata, elegancia en comportamientos, elegancia en miradas, en silencios…


“Si tu intención es describir la verdad, hazlo con sencillez y la elegancia déjasela al sastre.”
Albert Einstein

Hoy el cocinero, se levantó filósofo, la receta se me ha resistido, algún día haré una sección de make-in off, para que entendáis de lo que hablo, nunca imaginaríais cómo he elaborado estos coulants.
Al tajo…

Ingredientes

4 huevos
125 g. de azúcar
120 grs de chocolate para postres (yo, siempre utilizo uno de Yves Thuries )
100 grs de mantequilla
50 grs de harina
Hinojo fresco, hojas, no vulva
Pimienta negra en grano
Jengibre molido
Confitura de pétalos de rosa

Siguiendo la fabulilla, estos tres coulants están inspirados en la misma, yo he invertido las situaciones, el primero, perfumado con hinojo, suave…como el amor. El segundo, con jengibre, fuerte, picante, irascible…como la vida y el tercero, con pimienta negra, irremediable, sudorosa, …como la muerte.
Haremos los tres coulants exactamente igual, únicamente, añadiremos las especias/hiervas junto con el chocolate cuándo lo tengamos al baño María con la mantequilla.
Montamos los huevos con el azúcar, intentando conseguir el mayor volumen posible. Al baño María, fundimos el chocolate con la mantequilla –añadimos las especias-. Una vez haya enfriado el chocolate –tibio- lo añadimos a los huevos y a continuación, añadimos la harina. Mezclamos bien todos los ingredientes. Lubrificamos los moldes con mantequilla –algún día os enseñaré los míos-. Rellenamos e introducimos en el horno, el cual tendremos precalentado a 215ºC, horneamos durante cinco minutos. Coulants acabados, Insh Ala.

¿Montamos el plato?

Servimos los tres coulants juntos. Encima de cada uno de ellos, servimos la especia que le corresponda. En el caso de la pimienta en grano, sugiero, tener en maceración como mínimo 24 h. en Armagnac o en el caso del desierto en Mahia, un destilado a base de higos, que hace la función.
Se debe comer junto con las especias, acompañamos con confitura de pétalos de rosa y decoramos con hojas de hinojo fresco, previamente picadas.

La eterna primavera

Si algo tiene el desierto, es que las estaciones se confunden, de hecho, solo hay dos estaciones, verano y primavera.
El otoño, es la mejor de las primaveras en el desierto, los oasis florecen y dan lo mejor de ellos, arboles de hoja caduca, aquí no caducan nunca, las higueras no se quedan calvas, los almendros tampoco, por poner algunos ejemplos.
Nuestro oasis particular, nos está dan do este año, lo mejor de sí.
Prepararos en los próximos días con nuestras recetas al  hinojo.

18 comentarios:

  1. Que buena idea lo de aromatizar los coulants con distintas notas! Me la apunto.
    Me quedo con la intriga de ver tus moldes ;-)

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  2. Qué estupenda presencia la de vuestros coulants. Creo que me quedaría con el que simboliza la muerte, no es que esté negativo, es que por el chocolate y el picante siento pasión. Y sobre esto último hoy saldréis de dudas ;)

    Preparados estamos ya para ver vuestras recetas de hinojo, un ingrediente que usamos poquísimo, y que tiene un sabor y aroma muy particular.

    Un saludo.

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  3. Que maravilla de coulants exóticos!! todos diferentes y todos iguales....nos dejas muchas intrigas que esperamos las desveles en pocos días.
    Envidiable otoño!!!
    Bss

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  4. Disfruto mucho leyéndolos, me encantan sus historias de desierto.
    Los coulants se ven exquisitos!
    BESITOS y que tengan un buen día.

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  5. Por diosssss! que acabo de desayunar! no se puede empezar el día viendo este tipo de recetas que así es imposible mantener la linea (curva, si... pero linea al fin y al cabo :-P )

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  6. No tengo problema en que sigáis filosofando, a condición que siempre nos traigáis recetas tan fantásticas como esta ;-)
    Como me gustaría tener a mi también esas dos estaciones, firmaría donde fuera para no pasar más otoños e inviernos.
    Por cierto, he buscado información sobre Cordes (que no había oído hablar de él) está a 4 h. de casa, así que haremos una escapada de fin de semana, muchas gracias por la recomendación!!!!!!!!!
    Me quedo a la espera de esas promesas.......
    Besitos

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  7. Hola, acabo de conocer vuestro blog a través de otro. Me encanta vuestra cocina, así que me quedo por aquí de seguidora. Un beso

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  8. Me parecen más acertadas tus versiones de la fábula; aunque imagino que dependerá del momento de cada uno y de cómo lo viva y lo muera.
    Me ha encantado la frase de "tu tienes el reloj, nosotros el tiempo", encierra mucha sabiduría en pocas palabras. Y esa vena filosófica que tienes hoy, unida a los toques misteriosos, han hecho que los coulants se llenen de magia y pueda sentir los efectos que producen esas tres fases de la ceremonia del té.
    Yo también tengo muchísimo hinojo, así que espero ansiosa vuestras recetas. Como siempre un placer !!.

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  9. qué artistas que sois!!! imagino que lo oiréis muy a menudo!! alucino!!!!
    las rosquilletas que puse al lado de la sopa de calabaza son eso, grissini de paermsan con romero!!! adictivas!!!! un besazo

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  10. ... a mi me encantan los dátiles con baicón!! ... jijiji ... y los coulant me fascinan!! y seguro que vivir en un lugar así con ese clima, más!!! Besotes de la Vaca!!

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  11. Qué delicia de coulant...dar un bocado a cada uno y sentir algo diferente siendo a la vez lo mismo...como las historias del principio.
    Un besOO

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  12. En cada entrada nos descubrís aspectos que no son muy conocidos. Es un placer descubrir cosas de es país tan interesante.
    La receta me ha parecido una delicia. La idea de aromatizar el chocolate es maravillosa, seguro que son unos coulants absolutamente ricos.

    Besos,

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  13. Vaya, mi gozo en un pozo, acabas de frustrar mis fantasias, yo que pensaba que lo de los 3 tes era cierto, jejeje. Los chocolatines muy buenos. Saludso

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  14. Me encanta el relato.. me gustan los contrastes y me fascina el aroma que me imagino desprenden... una gozada para los sentidos
    Lxx

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  15. GRACIAS QUERIDOS AMIGOS, por estas explicaciones que poco a poco nos van ACERCANDO al SILENCIO, a la NATURALIDAD, y a la ELEGANCIA del DESIERTO :)

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  16. ya mismo me comia esos coulants, que contrastes para el paladar.

    Los colores, preciosos.

    Saludos

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  17. Me teneis enamorada¡¡
    Que maravilla estoy espectante¡¡
    estos coulant son deliciosos¡¡ y con ese aroma.
    Aqui sigo¡¡
    bss
    patricia

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  18. Todo me gusta,los relatos las recetas las fotos todo todo,otro bs

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