Bravas de boniato y membrillo, al Ras el Hanut y salsa harissa.
Hay muchas recetas, muchos productos, que han
nacido por casualidad, eso ahora, es más difícil, todos buscamos, investigamos,
probamos…
Esta receta, nació por casualidad, se trata de una
receta con historia ¿estáis listo?
En una ocasión, Ahmed un buen amigo, nos invitó a
la celebración de la fiesta de nacimiento de su pequeño Ahmed. Ahmed y su
familia, viven en medio de la nada, son pastores de dromedarios, nómadas.
Decidimos antes de emprender la marcha –estaban en
ese momento establecidos a más de treinta kilómetros de cualquier núcleo
habitado- pasar por el zoco y buscar algún regalo para el pequeño y algo para
amenizar la fiesta, casi siempre productos que resulta difícil para ellos
encontrar.
Al llegar al zoco, vimos que habían boniatos,
pensamos que sería un buen regalo para agasajar a nuestros anfitriones,
compramos también membrillos frescos, aceitunas, mahonesa –que les encanta- ,
especias, salsa harissa, frutas y como es tradicional en esa zona de mundo,
naranjas y azúcar para el recién llegado.
Entramos en pleno desierto, por pistas que cada vez
se hacían más pedregosas. La Ley de Murphy, hacia unos días había cambiado neumáticos
al vehículo, pinchamos dos veces. Nos quedamos tirados, imaginábamos a unos
quince o veinte kilómetros de nuestro destino. Empezaba a anochecer. Buscamos
todo lo incendiable e hicimos una fogata, con la vana intención de ser vistos
por Ahmed.
Entrada la noche, decidimos comer algo y esperar
al alba, de día todo se ve diferente.
Se nos ocurrió asar unos boniatos y unos membrillos,
los aderezamos con mahonesa y salsa harissa…Bravas!!! Pensamos.
No olvidaremos nunca aquella noche, fue una de las
mejores que hemos pasado en el desierto. Antes de la salida del sol, allí
estaba Ahmed, con dos dromedarios, que fueron los que transportaron nuestras
ruedas hasta el zoco, donde las repararon. Aún recordamos con Ahmed aquella
noche y aún hacemos con bastante frecuencia, estas bravas que os presentamos,
el pequeño Ahmed, ya tiene catorce años, cariñosamente, le llamamos “El Bravas”.
Ahí va la receta.
Ingredientes
Boniato
Membrillo
Salsa Harissa
Mahonesa o bien all i oli
Ras el Hanout
Limón
Troceamos el boniato y el membrillo, ponemos en
agua con sal y limón durante unos minutos, hacemos unas pajas de membrillo o
boniato, como queráis.
Hacemos una ll i oli, ligero puede ser perfectamente
mahonesa.
En aceite de girasol, muy, muy caliente, freímos los
componentes.
Mezclamos el all i oli con media cucharadita de
Ras el Hanout.
¿Montamos el plato?
Hacemos dos timbales, uno con el boniato y otro
con el membrillo, estos emulan los tamtam del desierto.
Ponemos encima el all i oli de Ras el Hanout y
salsa harissa al gusto.
Decoramos con las “paja” de membrillo y servimos
en salsera ambas salsas.
El Ras el Hanout y la Salsa Harissa
Ras el Hanout, significa literalmente “cabeza de la tienda” lo mejor, o “mezcla de especias” es típica sobre todo de Marruecos y del norte de Africa, hay la costumbre de confundirlo con el curry, nada que ver. La mezcla suele ser entre cuatro y cuarenta especias diferentes y se diferencian con nombres como: Lamrouzia, L'msagna y Monuza
La Salsa Harissa
Aunque más típica de Argelia, Túnez y Egipto,
también se consume en Marruecos, aunque con menos frecuencia y cantidad que en
sus vecinos. Se puede encontrar a granel en las tiendas de encurtidos y también
envasada.
Se trata de una salsa picante hecha a base de
pimientos específicos, de las comerciales, os recomiendo si la encontráis, Le Phare du Cap Bon, es tunecina y realmente buena.
Pues tengo que hacer sin remedio algo ya con boniatos. Estos días se han multiplicado por la blogsfera junto con las calabazas...claro es la época. Preciosa histoira y receta, como siempre.
ResponderEliminarMe quedo embobada con tus historias, me las imagino!!! lo explicas todo de una manera tan exótica que casi hipnotiza. Tus bravas me dejan babeando, suelo hacerla yo en casa y estas caerán en un próximo aperitivo, una delicia como siempre tus presentaciones. Bss y buen fin de semana
ResponderEliminarEsas bravas tan originales tienen que estar de lo más ricas!!
ResponderEliminarEl Ras el Hanout no cosigo encontrarlo por donde yo vivo,si no es mucha molestia ¿podríais decirme con qué especias lo puedo preparar?
Buen fin de semana
Un beso
Adoro sus historias de desierto, me podría pasar horas leyéndolas. Ojalá algún día las compilen en un libro porque son geniales, la redacción es muy buena y hacen amena la lectura. Por ahora me conformo con el blog, pero ojalá puedan plasmarlas en libro. Me avisan cuando eso pase, no se olviden?
ResponderEliminarLas bravas del desierto están buenísimas!!!
BESITOS
Tengo una relación de amor con el boniato desde niña.
ResponderEliminarExquisita presentación y receta chic@s!!!
QUE HISTORIA TAN PRECIOSA!!
ResponderEliminarHabéis logrado ponerme la PIEL DE GALLINA, y esto no sucede a menudo por desgracia.
ESTAS BRAVAS, ME LAS FABRICO YO EL DÍA MENOS PENSADO!!
Y el MEMBRILLO es uno de mis dulces favoritos asi que......
Increible
ResponderEliminarVeo que vuestra imaginación no tiene límites. Yo hice unas bravas de boniato con salsa pesto que también están muy ricas. Me gusta ese toque marroquí que le habéis dado con el ras el Hanout y la Harisa, y la presentación como siempre de campeonato. Pero pensando que el pequeño tiene ya 14 años, quiere decir que no sois nuevos por la zona.....muy interesante!!!!. Besos y buen domingo.
ResponderEliminarno me ves ... pero te estoy haciendo la ola!!...
ResponderEliminarQué raro!. había hecho un comentario y no lo veo. Esperaré por si aparece más tarde.
ResponderEliminarchiacio jordi peazo receta tas currao; como las das dao la vuuelta a las papas bravas con mayonesa.
ResponderEliminarsigue asxi campeon y pasa de falsos imitadores . como todavia me acuerdo de aquella noxe con las lentejas en la DUNA
Pues si que lleváis años en el desierto... la de historias que debéis tener. Realmente debió ser una noche extraordinaria y gracias a eso esta original receta muy adecuada para estos días. Bonitos, muy bonitos recuerdos. Un beso
ResponderEliminarMenuda historia que hay detrás de estas bravas de boniato!!! desde luego una historia para recordar!!!! un beso
ResponderEliminarlo pruebo, lo pruebo, lo pruebo YAAAAAAA
ResponderEliminarOstres!! Acabo de descobrir el vostre bloc i m'he quedat meravellada amb les històries, les fotos i les receptes!
ResponderEliminarI a sobre veig que el dia 15 vau publicar una recepta amb moniatos? No sé si coneixeu la iniciativa de la Recepta del 15, però simplement es tracta de que el 15 de cada mes els blocs que vulguin cuinen amb un ingredients que proposem per fer-ne un bon recull. si voleu que incloguem aquesta exquisitesa al nostre índex estarem encantants, només cal que ens deixeu l'enllaç al nostre bloc! Gràcies!
Una abraçada
Sandra
Reconozco que el boniato no es lo mío, así como las castañas me encantan de todas las maneras, el boniato me resulta bobo, pero también tengo que deciros que cuando he visto la receta me ha encantado la propuesta.
ResponderEliminarMe entusiasma leer cada receta porque creo que todas tienen una vida propia, imagino lo difícil que debe de ser vivir en un medio tan hostil como es el desierto y vosotros lo contáis con toda la naturalidad del mundo, os quedáis tirados en medio de la nada y os hacéis unas bravas de boniato, es para aplaudiros.
Por cierto, me gustaría saber porque a los recién nacidos se les lleva naranjas y azúcar, imagino debe de tener algún significado.
Saludos.
Acabo de descubrir tu blog me encanta todo ,las historias tus recetas te sigo un bs www.ehornodemaria.com
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