Kasbah du Toubkal, una kasbah de película
Los cinefilos, habréis situado rápidamente este lugar en fotogramas, luego os cuento.
A tan solo sesenta kilómetros de Marrakech, encontramos esta kasbah, un mítico con mucho encanto. Precisamente por ello, por la proximidad con Marrakech, esta, es una de las zonas más comerciales de esa gran e impresionante cordillera, que es el Atlas. A pesar de eso, el entorno continua siendo maravilloso y el establecimiento, para nuestro gusto, con mucho encanto y lo más importante, con alma.
Está situado en un poblado llamado Imlil y desde ahí, es el lugar más popular para ascender el Toubkal, el pico más alto del Atlas y de todo el norte de Africa, con 4.167 m.
Esta kasbah, es un lugar con historia, su propietario Mike McHugo, un inglés enamorado de la montaña, en los 80 del pasado siglo, decide (con muchisima moral) reconstruir una vieja kasbah en ruinas, asociándose con Maurice Hajj, un lugareño. Poco a poco y gracias al trabajo bien hecho, la kasbah fue haciéndose su lugar y convirtiéndose en lo que es hoy en día.
En el valle, existe oferta de más lujo, concretamente a pocos kilómetros hay otro conocido y lujurioso establecimiento de una importante cadena, pero y sin querer herir susceptibilidades, nada que ver. Como decía, este establecimiento tiene alma.
Algo muy importante para nosotros, es la cocina en este tipo de locales.
En este establecimiento, la cocina es tradicional bereber, se abastece de productos de proximidad, todo es del valle, los apasionados por el cordero, sin ningún tipo de dudas, este es su lugar en Marruecos, tajines y mechouis (cordero asado en horno bereber de barro) son de una factura intachable. Hariras y sopas, potajes de verduras y legumbres. Todo un placer comer o cenar frente a la chimenea en invierno o en alguna de sus impresionantes terrazas en verano sobre el valle.
Las habitaciones son confortables, con todos los servicios, sobrias y muy cuidadas, todas con vistas al valle y las orientadas a la vertiente sur, con vistas al Toubkal. La decoración es cuidada y respetando todos los materiales y construcción de los valles.
Una de las mejores relaciones calidad-precio de la zona.
No olvides reservar antes de ir.
La kasbah y el cine
¿Quien se imagina a Brad Pitt en "Siete años en el Tibet" llegando a un templo budista que, realmente, es la Kasbah du Toubkal? pues sí.
Escorsese, también pensó en este establecimiento cuando rodó, integramente en Marruecos, otra película inspirada en el Tibet "Kundun" y donde la kasbah, emuló en el celuloide, el monasterio de Dungkar.
Empezaba diciendo que es un lugar con alma, conforme escribo, añadiría también con magia. Es... una kasbah de película.
Kasbah du Toubkal
Imlil
www.kasbahdutoubkal.com
N: Las fotografías, son propiedad del establecimiento y han sido utilizadas con su autorización.
N: Las fotografías, son propiedad del establecimiento y han sido utilizadas con su autorización.
Qué pasada, y si encima la cocina acompaña al entorno, estoy seguro que se convierte en un paraíso para los sentidos. Un abrazo.
ResponderEliminarHola amigos. Yo he estado en este sitio, una vez en Imlil, el Tubkal es una montaña santa para los amazighen y muy bonito.
ResponderEliminarMuchas gracias por dar a conocer tan bien nuestro país.
Farida
Ah si! Siete años en el Tibet, es verdad...impresionante lugar para perderse!
ResponderEliminarCurioso lo de la película del Sr. Pit, y un enclave precioso.
ResponderEliminarqué preciosidad, tengo que volver a Marrakech!!! gracias por traernoslo, es maravilloso..bss
ResponderEliminarQue tramposillos son esa gente del cine, jejeje.
ResponderEliminarEl sitio es precioso y si encima se come bien, me gustan los lugares con alma.
Muacks
Ruth
Pues yo me apuntaba a la Kasbah con la companyia del sr. Pitt, que ya se la conoce, jeje.
ResponderEliminarFantástica recomendación, considerando que estamos programando visita de la zona para marzo.
Un abrazo!
De ensueño y para mi gusto un lugar con mucha mágia¡¡¡.
ResponderEliminarBss y gracias por descubrirnoslo.
Virginia "sweet and sour"
Me encantaría perderme ahí unos días!
ResponderEliminarQue fotos tan bellas. La del Atlas me recuerda a la cordillera de Los Andes, imponente y majestuosa.
ResponderEliminarEste post es para guardarlo en favoritos. No me gustaria perderme este lugar en un próximo viaje a esa zona.
Saludos
I per nosaltres, al Toubkal, el "rock duro", no?
ResponderEliminar¡Vinga, vinga que ho vau passar de pel · lícula! Aquelles caixes de pomes, no tenen res a envejar a aquesta kasbah. Bons records.
EliminarUna abraçada company
Que gustazo transitar por vuestro blog.
ResponderEliminarRafael Alberti deia: "Mai vaig ser a Granada...", a mi em passa amb el Marroc... tan sols conec Tanger en un viatge llampec des de Tarifa.
Bueno, creo que no cambié la forma de entrar.
EliminarHe estado varias veces en Imlil, la última con una ascensión al Toubkal que quedó en un intento, no llegamos ni al refugio.
ResponderEliminarNo logro situar esa kasbah, no la recuerdo, aunque no es de extrañar ya que siempre que he ido a esa zona la niebla y la nieve cubría casi todo el paisaje. realmente parece un lugar especial, muy guapo. Saludo.
Ibn
Me encanta descubrir sitios nuevos y sobretodo si son tan bonitos como esta kashab a la que espero visitar algún día.
ResponderEliminarQué maravilla de sitio!! Me iría ahora mismo para allá sin pensármelo dos veces!
ResponderEliminarMe lo apunto en mi wish list de viajes.
Gracias chicos.
Un beso grande.
IMPRESIONANTE CON MAYUSCULAS!!!!. Y de película.....nunca mejor dicho!. Besos
ResponderEliminardesde luego el sitio parece mentira este a 60 km deMarrakech,pero el Atlas es asi de magestuoso y desde luego un sitio ideal para el rodaje de peliculas,desde luego cuando vi la peli pensaba que era en el Tibet.El cine es pura magia¡¡
ResponderEliminaruna abraçada
Una belleza y con buena comida... perfecto. Feliz fin se semana, Clara.
ResponderEliminarDesde luego que es de película... un paraíso.
ResponderEliminarSaludos.
UN LUGAR SOÑADO, ME FASCINA ESA ESTÉTICA SOBRIA Y DELICADA. LAS MONTAÑAS SON MI LUGAR FAVORITO. QUÉ BELLEZA. BESITOS
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