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jueves, 29 de septiembre de 2011

Cigarros de dátiles con Lben al azafrán



Cigarros rellenos de dátiles con sabayón de Lben al azafrán.

Y con el otoño, llegaron los dátiles. Hablaré de ellos próximamente, son muy desconocidos en las cocinas occidentales y la mayoría de veces muy mal tratados. Estamos en plena recolecta, muestra de ello, son los múltiples moussems y festivales que se celebran durante el mes que entra a lo largo y ancho de ese gran sur Marroquí. Son muy importantes los del Valle del Drá o el Salón de Erfoud.

Esta receta, está inspirada en una muy clásica, como podrían ser los briouats de dátil, pero con ciertas modificaciones y con un toque propio. Es fácil de hacer, económica y muy buena como postre contundente o bien como acompañamiento de un buen té en los tiempos que entran. Probarla.

Ingredientes

Dátiles
Almendras
Azúcar
Canela
Agua de azahar
Pasta filo
Miel
Semillas de sésamo

Antes de continuar, os diré que el Lben, es una bebida típica de todo el mundo árabe, una especie de yogur liquido, aunque su origen es el desierto –leche agria de dromedario- se hace también con leche de vaca. En el blog de Georgina, encontrareis mucha y buena información sobre el producto. Lo encontrareis en España en las tiendas musulmanas. Yo parto de una marca comercial de mucha calidad. ¿Empezamos?

Sacamos la semilla a los dátiles, los escaldamos a fin de poder quitarles la piel –solo escaldados-, trituramos las almendras. Hacemos una masa con la carne de los dátiles, las almendras y el azúcar. Amalgamamos, añadiendo agua de azahar hasta que nos quede una masa parecida al mazapán. Añadimos la canela. Cortamos rectángulos de pasta filo. Hacemos una especie de canalón, no muy grueso, del tamaño de un cigarro, enrollamos cerrando los extremos. Horneamos hasta que queden dorados. Barnizamos con la miel y añadimos las semillas de sésamo. Reservamos.

Sabayón de Lben al azafrán

Calentamos una taza pequeña de Lben, sin que llegue a hervir. Infusionamos el azafrán y dejamos reposar durante veinte minutos. Una vez frio, lo mezclamos con el resto del Lben, lo ligamos bien. Listo.
Opcionalmente, se puede hacer con algún yogur cremoso o liquido, el resultado, naturalmente, no es el mismo, pero sí muy parecido.

¿Montamos el plato?

Hacemos una cama con el sabayón y dejamos enfriar. Colocamos los cigarros encima de esa cama. Decoramos con unos toques de confitura de pétalos de rosa y unos dátiles que opcionalmente, pueden ser rellenos de queso cremoso con nueces.
Como postre es contundente, ideal para una comida liviana, perfecto para acompañar con té entre horas.
Servir acompañado de más mermelada.

Dado que el plato está perfumado con azafrán, un buen té elaborado con esos estigmas de “oro rojo” o en su caso con la propia flor en temporada, sería perfecto, este té, es una receta típica de los valles de Taliouine en el Anti Atlas, donde se elabora todo el azafrán marroquí y de la que algún día hablaré.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Confitura de pétalos de rosa



Confitura de pétalos de rosa de la Kelaa M´Gounna.

Cada mes de mayo, en la Kelaa M´Gounna y el Valle del Dades, muy cercanas ambas al desierto, se celebra uno de los Moussems más conocidos del Sur Marroquí. Se trata de la Fiesta de las Rosas, como casi todos los Moussems, ligados a una recolecta o fin de temporada. Esta población y los valles próximos -  La Douce Vallee – cultivan ancestralmente grandes cantidades de Rosa Damasquina, que les ha dado una fama internacional. Aquí, en la zona, encontraremos todo lo derivado de esa flor, agua de rosas, confituras, esencias, cremas, lociones, ungüentos…no en vano, se recolectan en la zona entre 3000 y 4000 toneladas de flores.
 
Como siempre, deberemos ir muy en cuenta con la picaresca ya que no todos los productos que se venden en la zona, lo son de calidad, más aún, si tenemos en cuenta que esa es una zona de gran influencia turística. Pero no solo la picaresca es cosa de estas tierras, he sido testigo de autenticas trampas en Europa, casi siempre provenientes de tiendas de “Gourmets” donde venden esta confitura que hoy os presento y que nada o poco tiene que ver con la original. Particularmente os recomiendo una de Albert Ménès, realmente muy buena.

Os cuento como hacemos esta confitura, el proceso es simple, solo se deben tener en cuenta las cantidades y desde luego, conseguir la materia prima, es decir esos pétalos, libres de productos químicos y a ser posible la Damasquina, cosa que no resulta fácil dadas las cantidades y características.
Esta receta se la debo a Mouna, una vieja amiga del Valle del Dades, que la disfrutéis.

Ingredientes

1 Kg. de pétalos de Rosa Damasquina
1,5 Kgs. de azúcar
Agua mineral de calidad
4 limones

Deshojamos los pétalos de las rosas – un auténtico placer- los pesamos, les pasamos un agua ligera y escurrimos rápidamente. Los ponemos en un bol, añadimos el zumo de dos limones, cubrimos de agua y dejamos macerar en el frigorífico no menos de doce horas.
Rectificamos pesos. Un kilo de pétalos macerados, un kilo y medio de azúcar por pétalos de rosa y un cuarto de litro de agua nueva, agregamos el zumo de los otros dos limones. Llevamos a hervor lento muy lento, tomará un aspecto meloso. Esto está listo. Dejamos enfriar y guardamos en botes esterilizados. Nos durará más de un año, en lugar fresco, en el rincón…donde no llegan los gatos.

Usos

Increíble para elaborados de pato y oca, para carnes rojas, ensaladas.
Sugerente para degustar con pastas de té.
Novedosa para pescados blancos.
Indispensable para tu imaginación

Si no encontráis Rosa Damasquina, otra variedad excelente es la de Provins.

Membrillo de guarnición




Membrillo de guarnición

Ya los tenemos aquí. Llegó el otoño y con él, muy buena materia prima.
El membrillo, es un clásico dentro de la cocina marroquí, este preparado, cuenta con múltiples formas de hacerlo y varía de una zona a otra.
Se trata de membrillo fresco, cortado, que hervimos en agua condimentada.
Lo utilizamos como postre, como acompañamiento de múltiples platos o como guarnición en la tajine.
La mezcla de sabores, la acidez del propio membrillo, con el dulzor del azúcar o miel, el toque de la canela y su frescor, lo convierten en un acompañamiento delicioso. Adiós a las patatas fritas.

Ingredientes

Membrillo fresco.
Un limón
Una rama de canela
Canela molida
Azúcar glass
Azúcar

Cortamos el membrillo al gusto, lo introducimos en agua con limón a fin de evitar la rápida oxidación. En una cazuela, añadimos agua con la rama de canela, un chorro de zumo de limón y azúcar al gusto. Hervimos al dente. Retiramos y dejamos enfriar. Espolvoreamos con canela y azúcar glass. A gozarla…

lunes, 26 de septiembre de 2011

Tajine de pichón relleno Lehmam maamar




Tajine de pichón relleno. Tajine Lehmam maamar

Esta es para mi gusto, la mejor tajine, no solo de Marruecos, si no que me atrevería a decir del mundo árabe. Una vez más, esta es una adaptación, respetando la receta original e inspirada en otra menos popular. En esta ocasión, la elaboramos sin tajine, es decir sin la cacerola típica de tapa cónica. Puede elaborarse también con cualquier ave pequeña, codorniz, perdiz…Originalmente, en el relleno se utilizan fideos finos, yo prefiero el cous-cous, también adaptamos el membrillo fresco, las pasas y sustituimos las lentejas –normalmente se sirve así- por unos feixoes negros y otros blancos, que compramos en nuestro último viaje al Alentejo y que son una autentica locura culinaria. Se trata de un plato de mucha elaboración, para quedar bien, para cocinar sin prisas y disfrutar del resultado final. ¿Nos remangamos? …

Ingredientes

Para dos personas

Dos pichones
2 dientes de ajo
1 cucharada de cilantro picado
1 cucharada de perejil picado
1 cucharadita de comino en polvo
1 cucharadita de paprika dulce
1 cucharadita de canela en polvo
1 rama de canela
4 hebras de azafrán
Limón
Membrillo fresco
Pasas
Aceite de oliva
1 hoja de masa filo
Una nuez de mantequilla
Miel

Para el relleno

1 cucharada de cous-cous
3 hígados de pollo
1 de los ajos machacado
½ de las cucharadas de cilantro picado
½ de las cucharadas de perejil picado
1 cebolla rallada fina
Membrillo fresco y pasas
Azúcar
Aceite de oliva
Sal y pimienta.

Ponemos en un bol los pichones, añadimos todas las especias, un chorro de jugo de limón, una cucharada de aceite y un vasito de agua, Dejamos macerando mejor la noche anterior, vamos dando vueltas a las aves durante la maceración. Al día siguiente, envolvemos los pichones en papel film de plástico, añadimos parte de las especias y volvemos a envolver con papel de aluminio. Horneamos durante media hora –dependerá del tamaño de las aves-. Mientras, hacemos el relleno, en una sartén, sofreímos la cebolla rallada fina y el ajo triturado, añadimos el hígado de pollo que habremos picado previamente, sazonamos. Una vez hecho el sofrito, mezclamos y añadimos el perejil y el cilantro picado, reservamos. Hidratamos el cous cous. Mezclamos con el sofrito anterior.
Con el jugo que nos ha quedado de la cocción de los pichones, hacemos una salsa, incorporamos el resto de especias que teníamos en el jugo de maceración y una cucharadita de ese jugo. Horneamos hasta dorar. Dejamos enfriar las aves, las rellenamos con la mezcla de cous-cous e hígado. A fin de que no se salga el relleno, le hacemos una gabardina al ave con una hoja de masa filo. Reservamos. Ponemos a hervir los feixoes –lentejas, alubias…- que tendremos en remojo del día antes. Una vez hervidos, salteamos con una nuez de mantequilla, añadimos un par de cucharadas del jugo de la maceración. Reservamos. Cortamos unos taquitos de membrillo, caramelizamos en una sartén con miel, un chorrito de jugo de limón y canela. Esto está listo.

¿Montamos el plato?



Disponemos en el plato los feixoes, previamente, habremos gratinado las aves a fin de cocer la masa filo y calentar. Servimos encima y distribuimos las pasas y membrillo. Una exquisitez.

Hoy toca un buen vino, el plato lo requiere.

 
El Tandem, es otro de los grandes vinos del Domaine des Ouled Thaleb en Benslimane, como ya se habrá podido observar, mis preferidos y muy por encima de los Meknes. Este vino, nace de la fusión de Alain Graillot, gran viticultor francés del Rhone Septentrional con viticultores locales. Es un 100% Syrah, que creo, le viene a este plato, que ni pintado.
Es uno de mis vinos locales preferidos, incluso su etiqueta, es de las que da muy buen rollo, informal y con una relación calidad precio muy aceptable.



jueves, 22 de septiembre de 2011

Tentaciones de Isfannariyya con sorpresa de queso.



Tentaciones de Isfannariyya con sorpresa de queso.

Cuando conocí la cocina de Hiromitsu Nozaki, nació ante mí un nuevo mundo culinario, que convirtió a ese gran Chef japonés en una de mis musas.

Esta receta, está inspirada en una de sus recetas. Naturalmente, no tiene nada que ver con la suya, he intentado adaptarla a esta Nueva Cocina Marroquí y creo –al menos para mi gusto- el resultado final, ha sido muy bueno.
Se trata de unos aros de zanahoria –isfannariyya- rellenos de una mezcla de queso. Espero que os guste.

Ingredientes

Zanahoria
Comino molido
Comino en grano
Semillas de sésamo tostadas
Hinojo
Ciboulette
Jengibre


Pelamos la zanahoria y la torneamos a fin de que nos quede cilíndrica y todos los aros sean más o menos iguales. Cortamos trozos de un centímetro aproximadamente. Vaciamos con un abocardador. Escaldamos en agua hirviendo. Retiramos y ponemos a hervir en otra agua en la que habremos introducido una rama de hinojo fresco y unas semillas de comino –un par o tres, debe destacar el hinojo por encima del comino- y una punta de jengibre fresco, hervimos al dente. Retiramos e introducimos en agua con hielo. Reservamos y secamos. Con el queso de cabra, hacemos una pasta, añadimos una cucharada de semillas de sésamo, una pizca de comino molido y el ciboulette picado muy fino. Amasamos esa mezcla con un tenedor, vamos ligando añadiendo aceite de argán. Rellenamos los aros de zanahoria con esa masa.

¿Montamos el plato?

 

En este caso, el soporte en el que presentamos esta receta no es un plato, es algo muy diferente. No importa lo que es, si su significado ya que es un regalo de nuestros buenos amigos de Tons Interiors.
Disponemos los aros, decoramos con las semillas y una tirita de ciboulette. Una autentica tentación.





¿Hace un vinito?

 
El relleno es potente, la zanahoria le da cierto frescor si hemos conseguido “endulzarla” con el hinojo fresco, por lo que pienso en este gran vino que tiene ya una fama muy bien ganada. Se trata de un vino lejano a los tradicionales viñedos de Meknes, concretamente de la zona de Benslimane. El Aït Souala, es un vino del Domaine des Ouled Thaleb. Creo que sería el vino más adecuado para convertir esa tentación en pecado, su composición 25% Tannat, 25% Malbec et 50% Arinarnoa lo convierten en el mejor testigo. A disfrutarlo.




Safaryal o Mey Be con crema de almendras y queso Ajbane




Safaryal o Mey Be con crema de almendras y queso Ajbane

Si hay algo realmente increíble en los mercados marroquís, es ver el paso de las estaciones y los productos que estas nos ofrecen. Han empezado a llegar los productos típicos del otoño. En las zonas altas y el Atlas, este año, esta estación ha entrado por la puerta grande. En los zocos semanales, se encuentran safaryal –membrillos- madroños, manzanas de temporada y en el desierto, los dátiles, a punto de celebrar su fiesta grande con los diversos moussems.

Safaryal, es el nombre del membrillo en árabe, muy utilizado en la cocina marroquí, como acompañamiento sobre todo, en tajines y platos de carne, incluiré una entrada sobre ello. Son muchas las palabras que utilizamos habitualmente que vienen del árabe. Ya que hablamos de dulces y por poner solo un ejemplo, el almíbar, procedente del árabe hispano Al-Miba y a su vez, este del Persa Mey Be (Néctar de Membrillo) en el que está inspirada esta receta. Es fácil de hacer y muy, muy buena. ¿Empezamos?

Ingredientes

Carne de membrillo
Semillas de sésamo
La decoración será opcional, yo he utilizado unos madroños del Medio Atlas y unas almendras crudas.

En Marruecos, tanto mermeladas, confituras o en este caso el membrillo, son muy fáciles de encontrar a granel, de mucha calidad en los mercados. Normalmente, se tratan de elaborados artesanos. Es por eso que no incluiré la receta del dulce de membrillo, este lo he comprado ya hecho, de temporada.
Mezclamos en la Sopa de Almendras, dos cucharas de queso fresco de cabra Ajbane –o cualquier queso de cabra fresco- trituramos dándole una consistencia de crema fina. Esto está listo.

¿Montamos el plato?

Hacemos una cama con la crema, ponemos encima el membrillo cortado al gusto. Decoramos con las semillas de sésamo, las almendras, los madroños y en este caso con unas flores silvestres. Naturalmente, todo esto es opcional. Servimos frio.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Ensalada de zanahoria y naranja




Ensalada de zanahoria y naranja

Esta receta, está inspirada en otra de un buen cocinero marroquí –para mí el mejor- y a quien dedicaré una entrada en el blog.  La ensalada de zanahoria y naranja, es un clásico de la cocina marroquí, su base es simple y muy fácil de elaborar, zumo de naranja, zanahoria rallada, canela y agua de azahar.
La base de este postre es ese zumo, pero algo más elaborado. ¿Empezamos?

Ingredientes

Dos naranjas
Dos zanahorias
Agua de azahar
Canela
Una hoja de menta fresca
Una pizca de menta seca
Una pizca de jengibre molido
Un limón
Miel

Cortamos con la mandolina o bien con un pelador de patatas tiras muy finas y no muy anchas de zanahoria. Preparamos un bol, en él añadimos el agua de azahar, una hoja de menta fresca, una punta de jengibre molido y un chorrito de limón. Introducimos las tiras de zanahoria y dejamos macerar no menos de una hora.
Con la piel de una naranja, hacemos tiras, escaldamos en agua de azahar caliente y caramelizamos con miel.
Cortamos una naranja por la mitad, la vaciamos. Rallamos una zanahoria y hacemos un zumo de naranja, mezclamos, añadimos una pizca de canela y seguimos mezclando. Listo.

¿Montamos el plato?

Disponemos en un plato las tiras de zanahoria previamente mezcladas con las tiras de naranja caramelizadas, mezclamos. Colocamos encima las dos medias naranjas, rellenamos con el zumo de naranja con canela. Decoramos con almendras crudas, un poco de menta seca y unas tiras de ciboulette que previamente también habremos caramelizado.
Habréis observado que no añado ni pizca de azúcar en el plato, en Marruecos, es muy común servir ese zumo muy azucarado, a pesar de que se trate de un postre, particularmente prefiero no añadir azúcar y gozar del propio dulzor y acidez de la naranja, así como de las tiras de la misma caramelizadas.
Un toque de chocolate negro fundido, también le va de maravilla.
Animaros a hacerla, no os defraudará.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Pickle de ternera




Pickle de ternera con compota de manzana diferente y crema de espinacas.

El pickle, es un encurtido. En este caso seco. Esta no es una receta típica marroquí, pero varios conceptos, me han llevado hasta ella, os explico: Antes de tener nuestro aliado, conservábamos al más puro estilo nómada, en el desierto, los nómadas conservan carnes sobre todo con sal, en el Atlas, es más común, debido al clima secarlas. Una forma práctica y que a mi particularmente me gusta mucho, es hacer un encurtido de sal y azúcar en partes iguales, se produce una fermentación y el alimento, queda seco y puedes conservar posteriormente, por ejemplo en aceite. En algunos países árabes, como Irán, Líbano o Egipto por poner algunos ejemplos, se hacen encurtidos sobre todo de verduras, llamados mekhallel o torshy, emplean esa misma técnica, en seco, para encurtir carnes rojas. Esta técnica, es sorprendente, sobre todo con pescado azul, sardinas, caballa, etc. Incluiré alguna receta con esas bases.
 
Esta receta la completo con una compota de manzanas del Atlas –con diferencia la mejor fruta de Marruecos- ya que estamos en plena época, elaborada con muy poca azúcar, sal, jengibre, esencia de azahar, agua de rosas y canela y una crema tibia de espinacas al comino y cilantro.
Tendría también ciertas similitudes con el Pastrami Rumano.

No olvidemos si cocinamos con especias y esencias como es el caso, ser comedido con las cantidades, más vale pecar en defecto, aunque tanto el exceso como el defecto, puede estropearnos el plato. Si puedes, utiliza especias y esencias de calidad.

Os cuento como he hecho este plato, que aunque a priori parezca complicado, es muy sencillo, de fiesta, para quedar bien y muy resultón.
Os animo a que lo hagáis.

Ingredientes

Para el Pickle

Lomo de ternera cortado muy fino, el doble que si fuese un carpaccio.
Sal y azúcar
Una vaina de vainilla
Aceite de argán –pude ser de oliva de baja acidez-

Para la compota

Manzanas –preferentemente acidas, a mi me gusta utilizar la Granny Smith
Azúcar, sal
Jengibre fresco rallado
Esencia de azahar
Agua de rosas
Canela en rama

Para la crema de espinacas

Espinacas
Un nuez de mantequilla
Comino
Cilantro fresco.

Vamos a por el pickle…

Mezclamos en partes iguales sal y azúcar. Hacemos en una bandeja una cama, ponemos encima la carne y cubrimos totalmente con la mezcla. A un lado, sin que toque la carne, ponemos una vaina de vainilla. Dejamos en la nevera veinticuatro horas. Pasado ese tiempo, observaremos que en el plato hay como una especie de melaza, eso es debido a la deshidratación de la carne. Retiramos la carne y la cubrimos con aceite de argán. En un par de horas, se puede consumir. Siempre que esté cubierta, se conservará durante mucho tiempo, bien en la nevera o en botes herméticos fuera de ella.

Ahora a por la crema…

Escaldamos las espinacas en agua de rosas, puedes sustituirla por agua con dos gotas de esencia de rosas –dependerá de la concentración- . Introducimos en la batidora las espinacas, la nuez de mantequilla, dos cucharadas soperas del agua de rosas, una punta de comino molido, dos hojas de cilantro fresco y sal. Batimos y reservamos. Debe quedar con textura de crema.

A por la compota, esto está chupao…

Hervimos las manzanas previamente peladas y troceadas con un trocito de rama de canela. Las dejamos al dente, las chafaremos con tenedor. Rallamos el jengibre una vez retiradas y escurridas, añadimos tres gotas de la esencia de azahar, una pizca de azúcar y la misma cantidad de sal. Chafamos a mano con el tenedor y enmoldamos.

¿Montamos el plato?

Desmoldamos la compota –fría- retiramos del aceite dos lonchas de carne –su apariencia es parecida a la cecina, más rígida y con una sabor muy diferente- hacemos un corte a una de ellas a fin de entrecruzarlas, las clavamos en la compota. Justo antes de servir, calentamos la crema de espinacas y añadimos tibia al plato.

Misión cumplida.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Domaine Val D´Argan

Uno de los errores en los que suele caer quien visita Marruecos por primera vez, es pensar que el alcohol está prohibido en el país. No es así, no solo no está prohibido, si no que se producen varias especialidades, como vinos –que empiezan a ser grandes- cervezas y algunos espirituosos como la mahia, un destilado a base de higos y/o dátiles muy parecido a nuestro orujo y con origen en el sur de Zagora y zonas del Medio Atlas.

Me gustaría abrir esta sección hablando de unos vinos que he descubierto recientemente. Entrarían en el apartado de “Grandes Vinos”, lejos de algunas elaboraciones más modestas de la zona de Guerrouane y Meknes.

Este Domaine, el Domaine de la Val d´Argan, es una vez más la demostración de las cosas bien hechas y el amor y cariño hacia una idea inicial muy bien estructurada.

En el Domaine, ubicado en la zona de Essaouira y entre arganiers centenarios, elabora caldos de gran calidad, tanto blancos como tintos, así como aceites de oliva y argán, también de mucha calidad.

Amplían la oferta con un buen restaurante y con una Maison d´Hotes, donde poder degustar los productos propios y de la cercana Essaouira.

Un buen lugar para un buen homenaje. Seguir la pista a esos vinos y sin duda al Domaine.


viernes, 16 de septiembre de 2011

Labán Al Loz, Leche de almendras y/o sopa de almendras.




Labán Al Loz, Leche de almendras y/o sopa de almendras.

Hoy, había zoco semanal, hemos encontrado almendras verdes de temporada.
La Ciudad de Fes, es sin ninguna duda –para mí-, el mejor mercado de todo el país, en las cuatro estaciones y los siete días de la semana. Sus múltiples mercados dentro de la medina, son simplemente magia. De todos los Patrimonios de la Humanidad que conozco, Fes lo tiene bien ganado, un viaje solo para conocer esa medina, justifica todos los esfuerzos. No en vano es la medina medieval habitada, más grande del mundo árabe. Hablar de Labán Al Loz, es hablar de Fes. La primera vez que probé esa leche de almendras, fue en esa medina, busqué y busqué, probé y probé, pregunté…finalmente encontré el lugar. En pleno corazón de ese laberinto de calles, callejones y pasadizos, concretamente en la Dar Tazi, relativamente cerca de la Madrasa Karaouine, hay una granja, pequeña, fácil de reconocer, no es zona de muchos guiris y los establecimientos escasean. Allí en esa pequeña granja/lechería, Abdelatif, prepara la que es para mí, la mejor Labán Al Loz o leche de almendras, que jamás he probado. Solo hay una bebida de este tipo, que para mi gusto la supera, se trata de la B'raïb, a base de alcachofas y lácteos, una bebida fascinante, con muchas leyendas asociadas y que podemos, también, convertir en sopa. Hablaremos de ella cuando la temporada de alcachofas esté en su clímax. Como suele suceder, con esta receta, cada maestrillo tiene su librillo, yo, me quedo con el librillo de Abdelatif, os cuento su secreto:

Ingredientes (para un litro)

1 litro de leche fresca
4 cucharadas soperas de azúcar
¼ de kg. de almendras crudas (*)
Agua de azahar

Trituramos las almendras. Calentamos la leche sin que hierva e infusionamos las almendras picadas en la leche durante una hora (mínimo). Pasada la maceración, trituramos, añadimos unas gotas (al gusto, a mí me gusta ser generoso) de agua de azahar y servimos muy frio.

Para hacer una sopa de almendras.

Una sopa increíble para acompañar platos, sobre todo ensaladas, pescados a la parrilla y asados. La receta básica sería la misma. No pondríamos azúcar y la cantidad de almendras sería de 500 grs. a fin de conseguir una textura más espesa. Añadiriamos sal y una pizca de pimienta. Dependiendo del plato que acompañemos, sustituiríamos (o no) el agua de azahar por agua de rosas, jazmín o bien la especia que consideréis oportuno. Increíble con menta o jengibre. Resultona con canela (carnes rojas). Irreconocible con frutas rojas, madroño, fresas, frambuesas.

¿Montamos el plato?

Poco hay que montar, servir muy fría. Particularmente, me gusta añadirle un toque –solo un toque- de canela. Como hemos dicho, la sopa, la utilizaremos para acompañar platos o simplemente degustarla como tal. Prometerme que la probareis.

(*) Puede hacerse con almendras crudas sin ser frescas.