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viernes, 25 de octubre de 2013

Tarta de dátiles



Un capricho de Figuig

Nuestro bautizo pastelero en el blog. Nos ha costado meternos en harina, no es nuestro fuerte y aunque el acabado no es lo deseado, el resultado final ha sido delicioso, eso sí... una autentica bomba gastronómica, calorías por un tubo.

Esta, es una tarta típica de los oasis del sur y especialmente del de Figuig, luego os hablo de ello.

Ingredientes

Dátiles de calidad
175 grs de harina
1 cucharadita de canela
175 grs de almendras molidas
175 grs de mantequilla
70 grs de azúcar glass
1 piel de limón
3 yemas de huevo
Una pizca de sal

Para la crema de almendras

100 grs de mantequilla
100 grs de azúcar glass
100 grs de almendras molidas
Una pizca de canela
Una pizca de clavos de olor molidos
1 huevo

Empezaremos quitando las semillas de los dátiles y cortando por la mitad, reservamos. Tamizamos el harina, mezclamos con la canela, las almendras molidas, el limón rallado y la sal. Trabajamos la mantequilla (pomada) con el azúcar  cuando la tengamos homogénea  mezclamos con el harina y el resto de ingredientes. Trabajamos esa masa, nos quedará una mezcla gruesa, arenosa, añadimos entonces las yemas de los huevos. Continuamos amasando hasta conseguir una masa más fina. Reservamos en un bol tapado con film y reservamos una media hora. Sobre una superficie enharinada, estiramos la masa, colocamos en un molde al gusto, dejando reborde y pinchamos el fondo con un tenedor. Le damos un primer horneado a 180ºC durante unos diez minutos. Hacemos la crema de almendras, mezclando todos los ingredientes, incorporamos el huevo al final, amasamos. Colocamos dentro de la masa que teníamos reservada. Disponemos los dátiles al gusto. Espolvoreamos con el azúcar y horneamos de nuevo otros veinte minutos a 180ºC. Dejamos enfriar antes de servir y os recomiendo hacerlo con un Oporto o cualquier otro espirituoso. No hace falta recomendar ser comedido con las raciones.


Entre 200.000 palmeras datileras

Ya os había hablado de Figuig aqui, aunque de una forma más romántica.

Hace apenas unas semanas que esas doscientas mil palmeras, han dado sus frutos. Todo un mundo se abre a través de cooperativas y los productos y los derivados se multiplican, tanto en los siete ksares que pueblan el oasis  como en los zocos cercanos. Dátiles de primerísima calidad y de varias especies, carnosos, dulces como el arrope y cargados de vitaminas y proteínas.

Encabeza este blog una cita de Amin Maalouf refiriéndose a León el Africano, pues bien, el mismo León el Africano (El Hasan ben Mohammed el-Wazzan ez-Zayyâti) relata en su obra más emblemática, Description de l´Afrique y concretamente en el tomo 6º, lo que encuentra al llegar a Figuig. Lo hacía en busca del territorio Numidia y sus habitantes, los númidas y actual bereberes.

Un lujo de detalles, describiendo las diferentes etnias que en el oasis habitaban, los mismos númidas, árabes, la población negra hartanis, judíos, los nobles chorfas o las cofradías de marabouts. Nos relata la estructura del oasis, la ubicación de sus poblados (ksar) los sistemas de riego, con sus foggaras (canales subterráneos  la kharrouba, el sistema intel¡gente y sobre todo ecuánime del reparto de agua y, como no podía ser de otra manera, nos habla de sus palmeras y sus dátiles  Se piensa, que el palmeral de Elche, es hijo de descendencia directa del de Figuig, al igual que el famoso Indalo de Almería, ya que en los ricos yacimientos rupestres de la zona, se han encontrado los mismos grabados.

En fin, solo nos queda suspirar cuando se piensa en Figuig, una de las ciudades con más historia del país, entrada de las actuales dinastías y lugar olvidado, lejos de los circuitos turísticos masificados y con una idiosincrasia propia, donde se cultivan los mejores dátiles del país.

Feliz fin de semana.







lunes, 21 de octubre de 2013

Tajine arnab {Tajine de conejo}



Tajine arnab del Souss

El plato de hoy está inspirado en una receta de tajine típica de una zona muy concreta del Souss, al suroeste del país.

Se trata de una tajine que se elabora con conejo, membrillo, almendras e higos secos y donde el azafrán y el aceite de argán son protagonistas especiales.

La receta original, con los mismos ingredientes, se elabora a la forma tradicional de las tajines, es decir cocinándola en la cazuela cónica de ese nombre y mezclando todos los ingredientes y dándole una cocción larga. Dada las características de la misma -una de las mejores tajines que he probado- hemos querido versionarla y convertirla en esta sutileza otoñal, que sin duda es.


Ingredientes

1 lomo de conejo
Dos membrillos
Una cebolla
Almendras laminadas
Higos secos
Aceite de argán
Azafrán, cúrcuma, jengibre molido, sal, azúcar y pimienta
Agua de azahar
Una copa de Oporto

Empezaremos preparando un lomo entero de conejo, la haremos unos cortes transversales sin acabar de cortarlo, a modo de libritos. La víspera  ponemos a macerar ese lomo con la cebolla picada muy fina, la cúrcuma, unas hebras de azafrán, el jengibre y el agua de azahar. Hacemos lo propio con los higos secos, que pondremos con el Oporto o cualquier otro espirituoso. A partir de ahí, ponemos a rustir (asar) el conejo a fuego muy lento con todos los ingredientes del macerado en un poco de aceite de oliva. Laminamos el membrillo y reservamos el resto. Ponemos a confitar a baja temperatura con el aceite de argán y unas hebras de azafrán. Pelamos el resto del membrillo y cocemos en agua a la que añadimos una cucharada de agua de azahar, azafrán y una cucharada de azúcar, a fin de conseguir un puré.
Una vez asado el conejo, rellenamos los cortes con almendras laminadas que previamente habremos tostado ligeramente.
Lo servimos disponiendo en el plato las laminas de membrillo confitado, un poco de puré con los higos y el resto del puré que habremos mezclado con unas cucharadas de argán. En el momento de servir, gratinamos ligeramente y pintamos con el aceite del rustido. Un día de estos incluiremos también, la receta original. 


Faux argán

Son muchas las referencias y varias las entradas que hemos dedicado en el blog al mítico aceite, podéis verlas aquí o bien aquí. Precisamente en esta ultima, os hablaba de la receta del falso argán, pues aquí la tenéis.
Curiosamente mito, tiene las mismas letras que "timo" y en muchas ocasiones así es.
Podrá parecer que tenga algo en contra del famoso aceite... pues no, todo lo contrario, aunque si me gustaría, pues eso, desmitificar algunas leyendas que acompañan al mismo, así como sus milagrosas propiedades, tanto en la piel como en la cocina.
Aveces incluso he llegado a pensar, si el falso -dado sus ingredientes- es el que realmente hubiese dado esa fama al original, todo es posible o si ese sabor tan peculiar, se le debería atribuir más al falso que al original. Puedo hablar desde ambas perspectivas, como buen pardillo he comprado, guisado y loado con faux argán, como todo buen hijo de vecino que se precie, en el país de las "premières et la deuxièmes qualités".

Para elaborar tan preciado aceite, también conocido como el "oro del desierto" necesitaremos para elaborar un litro, los siguientes ingredientes:

Un litro de aceite neutro de semillas, una cucharada sopera de aceite de cacahuete y otra de aceite de sésamo  50 grs de avellanas crudas, 50 grs de cacahuetes crudos, 50 grs de almendras crudas una cucharadita de semillas de sésamo  Empezaremos tostando la mitad de los frutos secos y el sésamo  muy, muy tostados sin que lleguen a quemarse. Una vez realizada esa operación, mezclaremos con el aceite elegido, que previamente habremos mezclado con el de cacahuete y sésamo  añadimos el resto de frutos sin tostar, dejamos macerar durante mínimo treinta días,  pasado ese tiempo, retiramos los frutos secos y machacamos en un mortero, volvemos a mezclar con el aceite y dejamos macerar de nuevo de siete a diez días  Pasado ese tiempo, colamos y... voila ahí tenéis al faux argán ¿o quizá sea el verdadero?

Solo aclarar que no soy yo el inventor de tal prodigio de alquimia y que son muchos los litros de ese preparado que se vende como aceite de argán y loado por muchos de sus clientes.

Buena semana 

lunes, 14 de octubre de 2013

Safaryal Maasel {Membrillo gratinado}




Y con ellos llegó el otoño

Son bastantes las referencias que hemos hecho al safaryal o membrillo en el blog, como por ejemplo esta y es que este fruto, está presente en muchas recetas marroquíes en los meses otoñales, tanto en dulce como en salado, como acompañamiento o como primera estrella, como es el caso de la tajine safaryal de la que hablaremos un día de estos.

Contrariamente a lo que sucede en otras cocinas tanto españolas como americanas, la conocida carne de membrillo no es muy habitual, consumiéndose preferentemente, como acompañamiento de platos y/o postres, siempre cocinado y aliñado con otros productos como es el caso de este postre, muy sugerente y realmente bueno.



Ingredientes

4 membrillos
1 limón (zumo)
150 grs. de azúcar
Sal
100 grs. de oudi (mantequilla)
6 cucharadas de agua de rosas
1 cucharadita de canela
Unas galletas (preferentemente almendradas)
Almendras laminadas
Queso fresco o bien lben, yogur...


Empezaremos cortando los membrillos en cuartos, salamos y pintamos con el zumo de limón a fin de evitar la oxidación. Cocemos al vapor durante 20/25 minutos, en el agua de la cocción añadimos la mitad del agua de rosas. Una vez cocidos  fundimos en una sartén la mantequilla, añadimos la canela, el azúcar y el resto del agua de rosas. Cuando se nos forme el caramelo, caramelizamos los cuartos de membrillo, durante diez minutos girándolos continuamente. Trituramos las galletas, bien a mano o bien con un rodillo. 
Emplatamos, ponemos en en el centro unas cucharadas de esas galletas mezcladas con almendras laminadas y gratinamos unos minutos. Servimos tibio y acompañamos bien con queso fresco, lben o yogur natural.
Podemos hacerlo también siguiendo el mismo proceso con manzanas o peras.



Agua de rosas y safaryal


La combinación del agua de rosas con el membrillo, es todo un descubrimiento  y una delicatessen que te costará olvidar.

Al igual que sucede con otros ingredientes que se están haciendo un espacio en las cocinas occidentales, el agua de rosas es una de las que peor paradas salen. No se trata de un producto de fácil elaboración y su destilado ademas de ser laborioso, es caro y sometido en muchas ocasiones a picarescas y química en estado puro.

En los últimos tiempos, están apareciendo productos de mucha calidad, como por ejemplo la mayoría que comercializa esta marca Les Domaines, todos ellos naturales y seleccionados.

Si os gusta el membrillo, esta receta simple, os sorprenderá.

Feliz semana.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Rumman Hulba {Granada con fenogreco}


"En las montañas, hay una planta conocida como z´ittra (tomillo), deberás preguntar a los pastores, tiene que llegar hasta aquí seca. A final de verano, en los valles, las mujeres recogerán el trigo. Entre los bancales, nace otra planta, el hulba (fenogreco), harás acopio de esa planta, solo con ella y unos dátiles, puedes subsistir en caso de necesidad, unas ramas de cedro con sus correspondientes piñas, servirán para hacer la lumbre  y… finalmente, esperarás las primeras nieves, deberás traer hasta el oasis el suficiente hielo para acabar de completar el filtro…"  
Cuentos de Sidi Baqur


El fruto del paraíso


La rumman en árabe,  la tareman en bereber o la granada como la conocemos nosotros, es la protagonista de esta bebida tradicional y muy extendida en muchas zonas bereberes y a la que se le atribuyen muchísimas propiedades. Pero si por si sola, la rumman es una fuente de vitaminas, en este caso, acompañada con hulba, la convierte, ademas de fruta del paraíso, en una preciada medicina para muchas tribus bereberes, tanto del desierto como del Alto Atlas.

El Corán se refiere a los arboles del paraíso de esta forma:

"Sus arboles y frutas son muy abundantes, eternos y son de muchos tipos, pero con troncos de oro. Viñedos, las palmeras, las granadas y las acacias"

Se trata simplemente de un zumo de granadas con hulba (fenogreco). Algo tan sencillo como exprimir las semillas de este fruto y mezclar con fenogreco que previamente habremos dejado al remojo durante unos minutos con ese mismo jugo y que habremos molido después de  esa operación

Ingredientes

Una granada
Una cucharada de hulba

Independientemente de sus propiedades  que las tiene y muchas, se trata de un zumo que es una autentica delicia. El aroma y amargor del fenogreco combina perfectamente con la acidez y dulzura de la granada. Seguro que es pecado.


La Rumman


En los senderos, en las carreteras, en los oasis, en las medinas, en todas las tiendas del país, encontraremos durante este periodo cientos, miles de granadas, de diferentes procedencias y tamaños. Estarán presentes en muchas recetas, dulces y saladas, salsas, siropes y postres, pero la estrella de todas ellas, es esta, este zumo con hulba.

No detallaremos aquí cuales son propiedades, muchas, la red está llena de referencias a las mismas. Se utiliza absolutamente todo de la granada, incluso su cascara, tanto para usos medicinales como para brujería  filtros de amor y hechizos.

Presente en los jardines pensiles de Babilonia y en los grabados egipcios, símbolo de amor, fertilidad y prosperidad, según los griegos fue Afrodita quien plantó el primer granado. Hades, el primer dios de los infiernos, ofreció a Persefones este fruto para seducirla -que cabroncete-. En muchas culturas, está relacionada con los embarazos fértiles y con la lactancia. Tanto la Biblia como el Corán, hacen múltiples referencias a este fruto y el mismísimo Shakespeare, nos cuenta como Romeo, bajo el follaje de un granado, cantaba una serenata a Julieta.  Incluso Salvador Dali, repite muchas veces en su obra este fruto, Sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes del despertar, es  el más representativo.




Fueron los bereberes quienes introdujeron este fruto en Europa.



La hulba, el fenogreco


Se trata de una leguminosa, no es una especia.


La alholva (fenogreco) que es también como se conoce a esa planta en España,  es el derivado de hulba (Al hulba). También muy utilizada en Asia, en el caso del Chino mandarín  se la conoce como Huluba, sin haberse podido encontrar relación entre ambas lenguas.

Se trata de una planta que suele nacer de forma salvaje entre las mieses, campos de trigo y también, al menos en el Atlas, de maíz  Su fruto aparece en una especie de vainas y son plantas que raramente superan el metro de altura. Se consumen también sus hojas frescas, teniendo tanto el fruto como estas un aroma y un sabor muy característicos.

Es por ejemplo parte importante en el Saltah, el plato nacional yemenita y en el  Qormeh Sabzi iraní 

Separar la paja del trigo...

Todos sabemos a que se refiere esa frase, en el caso que nos ocupa, sería separar la hulba del trigo (o del grano) otra de las labores de las mujeres bereberes.

Las recolecciones en los valles, se sigue haciendo a mano, en las eras, es muy común ver a las mujeres buscando entre el grano su preciado tesoro... la hulba.

Preciado porque está muy relacionado con la maternidad. Las madres lactantes atribuyen, no sin razón, los beneficios de la hulba como un productor natural de leche, también las leyendas populares lo asocian al aumento de las mamas. El sabor que aporta la hulba a la leche materna, hace que los bebes sueñen con la toma. Dentro de la farmacopea bereber tradicional, la hulba forma parte de uno de los medicamentos más utilizados y con usos tan dispares como la salud mental, las infecciones e incluso la diabetes.

En todo caso, mezclado con el fruto del paraíso, es una delicia.


lunes, 7 de octubre de 2013

Mesfouf bezbib {Cous-cous dulce}




 Cuando la sémola se convierte en delicadeza

Existen cientos de formulas para preparar este cous-cous, presente en muchas festividades, bodas, nacimientos y sobre todo durante el Ramadán.

El mesfouf es típico sobre todo de Argelia y Túnez  donde se prepara tanto dulce como salado, incluso combinando con picante en ambas versiones.

En Marruecos sin embargo, está presente sobre todo en las provincias de Kaar es Souk y Figuig, posiblemente las menos conocidas del país y fronterizas, precisamente con Argelia. 

Se trata sin duda de uno de los cous-cous más sutiles que encontraremos en el país, con muchos matices, el agua de rosas, la lavanda y el sirope de dátiles  convierten  a este "postre-desayuno" en una autentica delicadeza.

Así se hace...


En la cultura bereber y árabe no cabe la posibilidad de utilizar sémolas que se cuecen en el microondas o en esas bolsitas que se sumergen en liquido y como por arte de magia se convierte en bolitas humeantes, después de leer la receta, entenderéis porque. Desde hace tiempo que tengo pendiente una entrada explicando como se elabora esa sémola  que dependiendo como se haga, pasará de ser un mazacote indigerible a algo muy sugestivo. Lo apunto.

Ingredientes para cuatro personas

500 grs de sémola
10 dátiles
10/15 orejones (melocotón o albaricoques secos)
1/2 granada
Dos cucharadas soperas de flores de lavanda
Cuatro cucharadas soperas de agua de rosas
100 grs de azúcar
Sirope de dátiles
Leche
Mantequilla o aceite

Empezaremos haciendo una infusión con la lavanda, para ello utilizaremos medio litro de agua en la que maceraremos las flores, una vez tibia añadimos el azúcar y mezclamos bien, seguidamente añadimos el agua de rosas. Hidratamos la sémola con esta mezcla hasta que quede totalmente seca. Procedemos entonces a la cocción de la sémola  Como marcan los cánones  la coceremos tres veces, al vapor y aireándola para separar los granos, podremos utilizar para este paso, bien mantequilla o aceite. En la ultima cocción, añadiremos al agua una cucharada de agua de rosas y otra de flores de lavanda.
Picamos finamente los dátiles y los orejones. Hidratamos en la cuscusera, al vapor, durante unos minutos. Mezclamos con la sémola e hidratamos ligeramente con un poco de leche. Montamos en el plato.

Presentamos con unos dátiles, la media granada para darle frescor, unas flores de lavanda y un chorro generoso de sirope de dátiles  También se puede utilizar miel neutra. Se consume con leche o bien con lben o leche agria. A disfrutarlo.


El sirope de dátiles Tahlaout


Tal como comentaba hace unos días y afortunadamente, cada vez son más los nuevos productos, derivados del dátil que aparecen por el sur y gracias a cooperativas agrícolas  dedicadas a la recolección de ese fruto.

Uno de ellos es el sirope de dátiles  un preparado que sobre todo a los que os gusta la pastelería y repostería, os dará mucho juego. Se trata de un sirope 100% natural, sin azucares añadidos, con un sabor muy singular y que por ejemplo, a este cous-cous, le va de maravilla.

Estoy completamente seguro, que al igual que otros productos que os iré presentando, este sirope, concretamente el de la Cooperativa de Aoufous, pronto se hará un espacio en las estanterías de delicatessen occidentales.

Buena semana.