Salata de berenchenas {Salata Maljasina}
Hace unos días, In Cucina, como nos tiene acostumbrados (muy bien), hacía una entrada sobre las berenjenas y los judíos españoles, con una cita sobre un "Banquete por Sefarad", que contaba la importancia de la berenjena en la cocina sefardí.
Si hay un ingrediente fetiche e indispensable en la cocina judía en general y sefardí en particular, ese no es otro que la berenchena.
Esta salata maljasina, es el origen del famoso zaaluk o caviar de berenjenas marroquí, también lo es de la famosa caponata siciliana o de otras muchas recetas catalanas, por poner solo algunos ejemplos.
Vamos a por ella, es fácil de hacer y un acompañamiento ideal para muchos platos.
Ingredientes
4 berenjenas
3 cebollas
1 kilo de tomates
Aceite de oliva
2 dientes de ajo
1 rama de apio
Aceitunas verdes
Azúcar, sal, pimienta negra, comino
Empezaremos pelando y escurriendo bien los tomates. Picamos la cebolla y la ponemos a freir, cuando empiece a estar transparente, añadimos el tomate, también picado, los ajos picados, la sal y el azúcar.
Mientras, asaremos las berenjenas a fuego o en el horno. Pelamos y cortamos a dados o tiras. Añadimos al sofrito. Añadimos las hojas de la rama de apio picadas (las blancas). Mezclamos bien y dejamos evaporar liquidos.
Una vez fría, rectificamos de sal y añadimos el comino y la pimienta.
Servimos con un chorro generoso de aceite de oliva crudo, la rama de apio sin las hojas y aceitunas verdes.
Listo.
Siete modos de guisar las berenjenas
Jacqueline Goldberg, tiene un blog de esos que tanto me gustan, con poco lirili y mucho lerele.
Maria Salgado, es una artista zamorana, que cultiva las raíces y bebe de las fuentes más puras de la música popular. De los boleros a los fados, de las guajiras a las peteneras o como el caso que nos ocupa, a la música sefardí, con una creación, en ladino, dedicada a las berenchenas y donde habla de esta receta de hoy, la salata maljasina, en esa recopilación "berenjenistica" sefardí.
"La salata maljasina
es pastosa y saborida,
mi vecina la prepara
con mucho aceite de oliva,
estos platos acompañan
a los rostros de gallinas."
Os presento a ambas y os invito a que las conozcáis.
Buen fin de semana.
Ummm que rico!!! se me hace la boca agua al ver las fotos, me la apunto, y caerá pronto seguro. Un abrazo.
ResponderEliminarbesosdecanelaymenta
Es un manjar y da igual como se prepare, siempre está deliciosa. Me quedo con esta forma de prepararla fácil y bien rica. Buen fin de semana, Clara.
ResponderEliminarRiquisima receta, que tengo que poner en practica, porque esta cocina me encanta, esta tan llena de sabores, saludos
ResponderEliminarSofía
Pues fíjate que desconocía completamente que la berenjena fuera tan importante en la cocina sefardí y en la judía en general. Ni idea. Mi madre, de origen andaluz, tiene muy intengrados los ingredientes de esas recetas. Me cuenta que viviendo en su pueblo de origen (Constantina), esa era una comida de temporada día sí y otro día también. Y yo he heredado esos tics suyos.
ResponderEliminarAhora ya sé qué origen pueden tener, porque algo debe haber en los orígenes de mi familia materna de por esos andurriales.
Besitos y gracias por toda la información que siempre nos traes.
Tode lo que lleve berenjena me encanta, y esta ensalada/pisto tiene una pinta estupenda.
ResponderEliminarUn besico.
Mi madre, que es de Granada, hace las mejores berenjenas fritas del universo. Y mi abuela, granaína también, hacía unas berenjenas con miel de caña que no se las saltaba un gitano. Me encantan estos platos, lo llevo en la sangre.
ResponderEliminarNosotros aquí también sembramos la rayada de Gandía, pero me gusta aún más la berenjena blanca. Nos trajeron semillas de Cataluña, y en Tenerife se da de lujo. Tiene una piel finísima y su carne es cremosa. Una maravilla.
Riquísima receta!
ResponderEliminarSaludos desde Argentina
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2013/11/la-fibra-en-la-alimentacion-diaria.html
شُكراً جَزيّلاً , gracias por el guiño. Vuestra propuesta me recuerda a la "caponata siciliana", en la que la berenjena es protagonista indiscutible, pero Sicilia está tan ligada al norte de África que su cocina no podía ser menos. Es curioso, leyendo "Banquete por Sefarad" me acordé de vosotros, la descripción de los ritos, la vida cotidiana marcada por las comidas, su elaboración y los ingredientes tienen mucho en común con vuestras maravillosas descripciones e historias. En estos tiempos en los que la cocina ocupa infinidad de programas de televisión, revistas, blogs, es tema de discusión habitual y nuestra vida en sociedad sigue marcada por la comida, me sorprende que al mismo tiempo se descuide esa parte de historia común, de los ritos y las migraciones, de la cocina como un rastro que la historia fue dejando hasta nuestros días. Por eso, entre otras cosas, es siempre una gozada leer vuestras historias.
ResponderEliminarQué buenísima receta, y que interesante lo que nos contáis, como siempre, bss
ResponderEliminarBonisima bonisima això si amb un pa d´aquests dels vostres ja ho arrodoneix del tot. Bon cds
ResponderEliminarMe ha encantado, fíjate que hace unos días publicaba yo la alboronía de orígen árabe y oye... que se da un aire!
ResponderEliminarEstupenda y rica. En plato o sobre tosta de pan. La he replicado (con tus medidas sale una barbaridad) y la he incorporado a mi blog (elPasaplatos). Con vuestro permiso y mi mención. Gracias.
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